OSIRISMELISASTRONOMIA.

martes, 21 de octubre de 2014

Un poquito de marte

Aunque las dos lunas de Marte, Fobos y Deimos fueron descubiertas en 1877 por Asaph Halls ya fueron “adivinadas” en el libro Los viajes de Gulliver (1726), curiosamente con gran acierto sobre sus distancias orbitales. También en la obra de Voltaire, “Micromegas” (1752), la casualidad hizo que un habitante de la estrella Sirio observara las dos lunas de Marte.



Fobos en griego significa miedo y es cierto que todavía hoy encierra algunos misterios para los astrónomos, aunque algunas incógnitas ya han sido desveladas. Fobos es como una enorme patata negra de 25 kilómetros de diametro. Refleja poco la luz solar, limitando así su observación porque es muy oscuro, y esto es debido a una capa de “regolito” (polvo), teóricamente originado por los impactos, que llega hasta los 100 metros de espesor. Una de las preguntas que actualmente debemos contestar es el porqué de este polvo, si la gravedad del satélite no es lo suficientemente intensa para atraparlo.

Fobos destacó frente a Deimos por sus especiales características. Su órbita y composición llamó la atención de los astrónomos. Durante la expedición del Mariner 9 Carl Sagan condujo un coche por California con la matrícula rotulada de PHOBOS, y junto a I. S. Shklovsii escribieron el libro “Vida inteligente en el Universo” en el que se especula sobre la naturaleza artificial de esta luna. En efecto, Fobos presenta una órbita anómala. Al estar por debajo del Límite de Roche (en este caso 6.000 kms) gira más deprisa que el planeta al que orbita. Esto provoca que cada 12 horas aproximadamente, esta luna se deje ver a simple vista desde Marte saliendo por el este y poniéndose por el oeste. Su tamaño desde Marte es como la tercera parte de nuestra luna llena, y desde allí se ve tanto de día como de noche (en los momentos en que refleje la luz del sol).


martes, 7 de octubre de 2014

El eclipse y una lluvia de estrellas que se producirá el mismo día marcan el comienzo astronómico del otoño de 2014.

Este próximo miércoles, 8 de octubre, personas de todo el mundo (salvo las que vivan en Europa, donde no se verá) podrán asistir, de nuevo, al espectáculo que supone observar un eclipse lunar. La Tierra, iluminada por el Sol, creará una sombra larga que tapará nuestro satélite por completo durante una hora.
Según la NASA, el eclipse total comenzará a las 06:25 horas tiempo del este de Estados Unidos (05:25 horas, tiempo de la ciudad de México) y durará hasta las 07:24 horas tiempo del este de Estados Unidos (06:24 horas tiempo de la ciudad de México).
Mientras dure el eclipse, la Luna volverá a adquirir un color rojizo. Debido a que ocurre justo después del perigeo, el punto más cercano de la Tierra en la órbita de la Luna, esta “luna de sangre” será casi del tamaño de una superluna; siendo 5.3% más grande que la anterior, que ocurrió el 15 de abril.
Este próximo eclipse de Luna coincidirá, además, con una lluvia de estrellas, las Dracónidas, cuyo momento álgido se producirá tanto el 8 de octubre. Las Dracónidas son pequeños fragmentos del Giacobini-Zinner. La lluvia de meteoros recibe este nombre porque su punto radiante casi coincide con la cabeza de la constelación Draco, el Dragón, que se encuentra en el hemisferio norte.
A los que sí puedan disfrutar del eclipse y quieran incluso fotografiarlo, estainfografía de Ana Feria les vendrá muy bien. En ella se explica por qué ocurre un eclipse de Luna, por qué la luna se pone roja, como teñida de sangre y cuáles son las condiciones óptimas para contemplarlo y fotografiarlo.
(c) Ana Feria / http://www.astroshop.es